lunes, 7 de octubre de 2013

Compás de espera

Nada que hacer, sólo dar tiempo al tiempo y esperar acontecimientos que iré resolviendo tal como vayan llegando.
Paciencia...

jueves, 26 de septiembre de 2013

Visto para sentencia

Nada más le ha faltado dar con el mazo en la mesa...
Esa ha sido la impresión que me ha causado, hoy ha terminado el juicio. La juez ha llevado a cabo su disertación* final. En este juicio no hay ni abogado ni fiscal, sólo la doctora de la mutua frente a mi.
"Yo creo que estás incapacitada para planchar y así voy a informar a la inspección".
"No es que me vayan a hacer caso, ellos decidirán lo que les de la gana y pueden denegarte la incapacidad".
"Mi impresión es que no puedes ir a planchar, así que te incapacitarán y tendrás que buscarte otro trabajo, que tal y como están las cosas ahora no es fácil".
"A ver, Carmen, no se para que trabajo estarás capacitada, tendrás que ponerte con un teléfono a hacer llamadas de esas que nos molestan a todos a cualquier hora"...
Estas son algunas de las perlas (no todas) que me ha dedicado la señora en cuestión, todas ellas lanzadas así sin más, pues ni siquiera respondían a ninguna pregunta ni a nada que yo haya dicho. Así que estoy como reo a la espera de sentencia.

                          ......................

*(La disertación consiste en una exposición oral individual en la que se desarrolla un tema con la intensión de analizar a fondo uno de sus aspectos, exponer un punto de vista e invitar a nuevas reflexiones. Es un proceso intenso de comunicación, dado que, al igual que los discursos oratorios y las exposiciones de clase, existe un solo emisor que guía el proceso)

domingo, 22 de septiembre de 2013

De nuevo por aquí

Pues eso: que hoy de nuevo he sentido la necesidad de expresar...
Qué tiene hoy de diferente? En realidad apenas nada, un día más, un domingo más aquí en casa...
Como todos los días desde hace meses me he levantado temprano; al cabo de unas pocas horas en la cama, ésta se convierte en instrumento de tortura. También como casi todos los días, con el cuerpo aún entumecido (cómo digo muchas veces: me falta "3 en 1" en las bisagras, y eso es más evidente recién levantada) me he sentado frente al ordenador en busca de novedades. Al abrir mi página en Facebook lo he visto, ahí estaba el enlace a ese escrito de Carmen Martín en su blog "Fibromialgia Noticias". Por si alguien llega hasta aquí y le apetece leerlo, se puede ver en  http://fibromialgia-noticias.blogspot.com.es/2009/08/cuando-se-tiene-fibromialgia.HTML
Desde hace ya bastante tiempo me gusta leer lo que se publica sobre el tema y especialmente ese blog de Carmen Martín que está siempre a la última, con escritos y noticias serios y bien documentados. Me gustan sobre todo sus artículos de opinión, en los que se expresa tan maravillosamente bien que consigue que me sienta identificada por completo.
Así es esto: tengo Fibromialgia, palabro raro dónde los haya. Pero lo malo no es esa rareza, sino la casi total incomprensión a la que nos enfrentamos todos los días en todos los ámbitos de nuestra vida quienes la padecemos.
Están los conocidos con su "qué buen aspecto tienes" o "pues tienes muy buena cara". Señores... que en la cara no me pasa nada y que la fibro no altera el aspecto de nadie.
Están también los bienintencionados que tratan de 'animar': "lo que tienes que hacer es ponerte a trabajar, que estando ocupada se te olvidan las tonterías"... "te daba yo un meneo que te ibas a poner en marcha de una vez"
Están las Administraciones públicas, que merecerían capítulo aparte por cerrarse en banda a nuestra situación real.
Están los propios médicos, los que se sacuden la responsabilidad mandándote de la Ceca a la Meca sin ton ni son, los que abiertamente se te quitan de en medio con frases más o menos amables o correctas, hasta los groseros que te despiden con un (y cito textualmente a un señor, doctor en medicina y especializado en psiquiatría): "Señora, quien la ha mandado aquí? Haga el favor de no perder su tiempo ni hacerme perder el mío en tonterías. Soy especialista en psiquiatría y aquí se tratan enfermedades mentales verdaderamente graves como la esquizofrenia o la auténtica depresión, no estados de decaimiento causados por un ligero malestar"
Ciertamente es difícil de entender. Yo misma, cuando la enfermedad tuvo a bien manifestarse abiertamente (pues ya en la clandestinidad llevaba años haciendo de las suyas), lo primero que me dije a mí misma fue: "Esto no va a poder conmigo, no va a cambiarme la vida". Qué equivocada estaba!
Cambia hasta lo más simple. Me gustaba ir caminando a todas partes, con paso rápido y zancada larga; ahora calculo las distancias a recorrer según los descansos que voy a necesitar y los llevo a cabo despacio y a pasitos cortos. Me gustaba mi trabajo en todas sus facetas; ahora me siento culpable de ser una carga para la empresa en la que 'trabajo', pues en los últimos tres o cuatro años he pasado más tiempo de baja que trabajando.
Ahora se me plantea otro tema: La temida por todos los enfermos de fibromialgia Inspección Médica, a decir de la doctora de la mútua en breve habré de pasar por ella, y también a decir de esa señora, con perspectivas poco o nada halagüeñas o esperanzadoras; según ella, las alternativas son dos: que me manden a trabajar o que me incapaciten para mi puesto con una pensión mínima. Está claro que ni una ni otra ayudan, más bien al contrario, pero he decidido hacer en esto como últimamente hago en todo: paso a paso, primero el 1 y después el 2, y según se vayan sucediendo los acontecimientos los iré enfrentando y tomando las medidas oportunas.
Todo esto venía a cuento de haber leído el escrito de Carmen Martín en Fibromialgia Noticias.
En los últimos años he pasado por diferentes estados de ánimo, casi todos pésimos, pero poco a poco estoy aprendiendo a 'separar' el malestar físico, que va yendo continuamente de mal a peor, del estado anímico. Aprendo a valorarlo todo de modo distinto, a sacar partido de las pequeñas alegrías, a celebrar el haber hecho una caminata que en tiempos me llevaba 10 minutos en media hora, pero sin ninguna parada de descanso.
Lo que trato de expresar, es que no me he dejado vencer (aunque en ocasiones haya estado muy cerca). Simplemente he cambiado mi forma de enfrentar la vida, ya no vivo el inmediato ni la prisa ni el sobreesfuerzo, ahora vivo paso a paso, poquito a poco, descansando cuando lo necesito para reponer mis escasas fuerzas e intentando no adelantarme a los acontecimientos, sino ocupándome de ellos según se van presentando.
No es una vida maravillosa, pero lo era realmente la de antes? En cambio es una vida serena, lo que no es poco tal como anda la sociedad actual.

jueves, 23 de agosto de 2012

martes, 20 de septiembre de 2011

AMANTES... AMIGOS...

NUESTRA AMISTAD

Se ve tan claro, que estoy confusa.
Debiera de ser muy simple, sólo hay que hablar. Sin embargo no hablamos...
Por todo lo compartido hablemos, para que lo más hermoso no se pierda.
Quiero que nuestra amistad dure eternamente,
no se cómo... pero lo lograré.

domingo, 30 de enero de 2011

Ser padres no lleva folleto de instrucciones...

Convertirnos en padres lleva implícita la firma de un contrato. Ese contrato nos compromete a cuidar por siempre de nuestros hijos... a darlo todo por ellos, incluso la propia vida si fuese necesario. En ese contrato no existe clausula alguna que obligue a nuestros hijos a estar agradecidos, al fin y al cabo lo que hacemos no lo consultamos previamente con ellos... lo hacemos convencidos de que es lo mejor... aunque en muchas ocasiones andamos errados, así que no debemos sentirnos defraudados. Sí que lleva una clausula que nos obliga a estar siempre a su lado suceda lo que suceda a lo largo de sus vidas y de la nuestra, sobre todo en los momentos más importantes para ellos.